Es un paisa de expresión clara y solvente, de palabras precisas, un artista consagrado que, entre otras cosas, ha sido jurado de los Carnavales de Negros y Blancos de San Juan de Pasto. Desde muy pequeño mostró gran inclinación por la expresión visual, recuerda que, en lugar de jugar con sus hermanitos, se interesó por el mundo de los colores y las formas.
Pascual Ruíz Uribe nació en Medellín y ha realizado importantes exposiciones en galerías nacionales e internacionales, dice que no fue un gran estudiante, aunque se esmeraba en los trabajos artísticos y un profesor de dibujo publicitario le reconoció su talento y le habló del instituto de Artes Plásticas en 1968.
Pascual Ruiz Uribe es un artista que ha logrado difundir su obra por varios continentes, fue invitado por el Instituto de Cultura Hispánica de Madrid para una exposición de arte iberoamericano y la calidad de su pintura lo convirtió en un trashumante por Estados Unidos, Uruguay, Argentina, Ecuador, Italia, España, México y Emiratos Árabes, entre otros países.
Piensa que en Colombia los recursos de la cultura no están llegando a los artistas con los propósitos trazados y que los procesos de selección de los mismos siguen siendo inadecuados. “Se entregan 280.000 pesos a manera de pensiones a los pocos artistas que seleccionan”, observa. De igual manera, considera que el arte moderno en manos de curadores obstruye la difusión de las obras, ignorando que en el país existen estupendos artistas que son olvidados por el gusto o el interés comercial de un curador.
El antioqueño ha sido jurado de los Carnavales de Negros y Blancos de San Juan de Pasto, expresión popular que define como de las más valiosas y pintorescas del país, y a la cual le hizo recomendaciones importantes como la necesidad de eliminar (o situar de manera subterránea) redes telefónicas, eléctricas y similares para facilitar el traslado de las carrozas y motivos alegóricos.
Afirma que a los artesanos se les debería llamar artistas porque son verdaderos escultores con una creatividad excepcional y que por lo tanto es un deber brindarles espacios adecuados para la elaboración de sus carrozas. Lamenta que en el carnaval se utilicen elementos agresivos y de manera grotesca como las espumas y la harina, desvirtuando la naturaleza y la cultura de un carnaval que se basaba en la respetuosa “pintica” de otros años.
Pascual Ruiz Uribe ha contado con reconocimientos de mucha valía que le entregó la Alcaldía de Medellín, la Asamblea de Antioquia, la Gobernación del mismo departamento y la Cámara de Representantes. A sus 65 años es un artista consagrado de una inmensa calidad humana que continúa creando “con disciplina y originalidad, una temática cambiante, siempre con propósito de búsqueda”, como se afirma en la colección Vivan los creadores, un libro que le dedicó el Instituto de Cultura y Patrimonio y la Gobernación de Antioquia. Ruiz Uribe es una muestra del temperamento, la pujanza, inteligencia y creatividad, atributos muy raizales de la cultura paisa.