“Pupiales es un municipio herido que no se resigna”: Marcela Erazo Carvajal
- Albeiro Arciniegas Mejía

- hace 12 minutos
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A Marcela Erazo Carvajal –contadora pública, empresaria y lideresa–, incluso antes de hablar, se le nota una mezcla de firmeza y ternura que suele tener las personas que trabajan con la gente. Profesional y con postgrados en diversas universidades del país, formación que suma a experiencias en el sector público es una joven que hizo del servicio ciudadano su terreno favorito.
Su formación académica, según ella, “permite entender la importancia de articular lo público y lo privado para la construcción de territorios”. Tiene raíces pupialeñas y proviene de una familia campesina y fue concejal de Pupiales en el periodo 2016–2019, impulsada “por la bendición de Dios y por muchos pupialeños que creyeron en refrescar el panorama político”.
Lo bueno siempre es más grande que lo malo
Hoy Pupiales no atraviesa sus mejores tiempos. Y Marcela no maquilla la realidad. “Se vive un momento muy complejo y delicado”, admite. “Como ciudadanos sentimos una enorme preocupación. Más aun, cuando pareciera que hay un vacío jurídico y, por instantes, nos sentimos huérfanos, sin ese respaldo que representan las autoridades”.
Pero su discurso no cede al pesimismo. “Los cargos pasan y el municipio queda, debe cesar la oscuridad y debemos ver con esperanza los tiempos por venir”. Para ella, la reconstrucción de Pupiales no depende únicamente de decisiones de gobierno, sino del trabajo cotidiano de los pupialeños: maestros, agricultores, emprendedores, estudiantes.
“Pupiales ha sido semillero de docentes en toda la provincia”, recuerda. “Y hoy también los pupialeños están forjando empresas. Somos nosotros quienes construimos el municipio día a día”. Sobre el papel de la mujer agrega: “Es pilar fundamental en la sociedad contemporánea. Mi admiración para las madres, las campesinas que trabajan la tierra, las profesionales que lideran empresas. Todas tenemos la capacidad de construir lugares mejores”.
Y recuerda una frase del papa Francisco: “En Latinoamérica, la esperanza tiene rostro de mujer. Y también en Nariño y en Pupiales. Entre nosotras debemos respetarnos, construirnos y llevar ese espíritu conciliador a dónde vamos. Lo bueno siempre es más grande que lo malo. No debemos quedarnos mirando el punto oscuro en la tela blanca, pues como usted suele decir los buenos somos más”.
Marcela Erazo Carvajal encarna un tipo de liderazgo renovado. Habla con la serenidad de quien entiende a las comunidades desde adentro y, en medio de la compleja coyuntura que atraviesa Pupiales tras la captura de su alcalde para adelantar un proceso de extradición hacia los Estados Unidos, su mirada parte de una convicción: las comunidades pueden reconstruirse desde la esperanza, el trabajo y la participación.
Era esta una entrevista necesaria, de esas que recuerdan que incluso en los territorios golpeados por el infortunio persisten voces que siembran, que multiplican e insisten en que la luz vuelva. Vendrán mejores tiempos y Marcela Erazo Carvajal, valiosa mujer nariñense con su trabajo de empresaria y líder social, sin duda, ayudará a retomar el rumbo que hace rato se perdió por la ambición y los intereses ilegales de unos pocos.






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